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Luis Enrique de la Villa Gil 
La creciente importancia que ha alcanzado la responsabilidad social corporativa reclama progresivamente la atención de los especialistas, vacilantes ante la estrategia elaborada para otorgar una mejor imagen a la empresa capitalista. Sin embargo este comentario quiere llamar a las cosas por su nombre porque la empresa es, ante todo, "persona interesada" en el empeño. La Sala Cuarta (Social) del Tribunal Supremo ha situado esta cuestión bajo la esfera jurídica del poder de dirección, pero esta tesis no puede compartirse porque la responsabilidad social corporativa es voluntaria (área autonómica) por hipótesis, en tanto que la orden dictada por el empleador es coactiva (área heterónoma) por hipótesis.
La creciente importancia que ha alcanzado la responsabilidad social corporativa reclama progresivamente la atención de los especialistas, vacilantes ante la estrategia elaborada para otorgar una mejor imagen a la empresa capitalista. Sin embargo este comentario quiere llamar a las cosas por su nombre porque la empresa es, ante todo, "persona interesada" en el empeño. La Sala Cuarta (Social) del Tribunal Supremo ha situado esta cuestión bajo la esfera jurídica del poder de dirección, pero esta tesis no puede compartirse porque la responsabilidad social corporativa es voluntaria (área autonómica) por hipótesis, en tanto que la orden dictada por el empleador es coactiva (área heterónoma) por hipótesis.
