Se analiza la inminente alteración de las estructuras de poder en América Latina desde seis perspectivas: el papel de los militares en las estrategias de transición; el predominio de la reforma sobre la ruptura política; los niveles de competición electoral; el impacto de la dominación autoritaria en la cultura política de las élites y las masas; el efecto de la despolitización prolongada y el control social sobre los valores sociales; la influencia de otras naciones en la transición del poder; la relación entre democracia y desarrollo económico; la comparación entre una mera operación de democracia y su implantación institucional. Se afirma que la experiencia reciente de España puede orientar en el proceso de democratización