Las grandes empresas han sido de forma clásica los principales clientes de las entidades de factoring, pero cada día observamos más que las pymes están descubriendo la utilidad del factoring en su desarrollo económico, puesto que les ayuda a evitar el riesgo de fallidos por insolvencia, les proporciona liquidez inmediata financiando el importe de las ventas y les permite realizar una mejor planificación de su tesorería.