La consolidación entre entidades de crédito ha sido uno de los elementos más destacados del panorama financiero mundial desde hace varias décadas. En este proceso, las sinergias operativas derivadas del tamaño y la mejora de la gestión de la entidad adquirida parecen haber jugado un papel destacado, especialmente tras la desregulación y los recientes avances tecnológicos. Con objeto de evaluar la verdadera importancia que han cobrado esos dos factores, realizamos un análisis multilogit de las características que presentaban las entidades pertenecientes a la Europa continental, con anterioridad a su participación en operaciones de fusión y/o adquisición entre 1993 y 2001. Los resultados obtenidos muestran que, si bien las economías de escala no son relevantes, las entidades de crédito tratan de alcanzar un mayor tamaño por motivos defensivos o para poder competir, efectivamente, a nivel global. Por su parte, la mejora de la gestión de las entidades adquiridas sí ha desempeñado una importante labor en todo este proceso.