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Jesús David Orozco Vanegas
Cuando en un contrato se pacta la cláusula compromisoria, entendemos que las partes sustraen de la competencia del conocimiento de la justicia (ordinaria o administrativa) la resolución de los eventuales conflictos que surjan de la interpretación, ejecución o liquidación del mismo. En el caso de la contratación administrativa, la ley autoriza expresamente su implementación, pero no puede entenderse que ésta es absoluta, y por el contrario, es necesario establecer límites a su aplicación, ya que no se puede olvidar que en este caso una de las partes contratantes es el Estado, que tiene ciertas prerrogativas y facultades que le son propias a su calidad, en las cuales se compromete el orden jurídico y el ejercicio del poder público, aspectos sobre los cuales no se puede disponer. En este ensayo se abordan sólo algunos de los aspectos e inconvenientes que tiene el arbitramento en materia Administrativa, sobre todo en los casos en que se discute sobre los vicios o defectos del contrato como acto jurídico.
When a contract contains a compromising clause, it is clear that each party has agreed to take away the competence of knowledge from the Justice (Ordinary or Administrative) of the decisions of the eventual conflicts that could come up about the interpretation, execution or liquidation of the same contract. In the special case of administrative contratation, it is the law who explicitly authorizes its use, but we must understand this authorization as limited, because it can not be forgotten than in this kind of contratation, the State is always a party, and as if, it has it's prerogatives and powers of it's own, in which is compromised the juridical order and the exercise of the public power; aspects that can not be disposed. In this essay I will tray to tackle just a few aspects and inconvenients of the arbitrage in administrative matters, most of all in those cases that is discussed about the vices and nullities of the contract as a legal figure.
