En el presente trabajo se analiza la denominada estrategia de industrialización orientada a la exportación, tanto desde un punto de vista teórico como a partir de sus resultados en la práctica. Del análisis se desprende que no existe un único modelo de industrialización orientado al exterior que pueda ser aplicado a todos los países que buscan alcanzar la senda del crecimiento económico. Ni siquiera es posible trazar una relación de causalidad nítida entre comercio y crecimiento, ya que la evidencia empírica ha mostrado que hay otros factores que cuentan, y mucho, en la explicación de un fenómeno tan complejo. En este sentido, puede afirmarse que la apertura comercial es en general recomendable, pero teniendo en cuenta que su instrumentación debe reflejar las condiciones internas de cada país.