Angel Díaz Barriga
En los últimos diez años se ha dado un significativo impulso en México a la aplicación de pruebas masivas, técnicamente llamadas a gran escala. Si bien desde mediados de los setenta han operado estos instrumentos, hasta ahora los resultados se han difundido entre la sociedad. Sin embargo, a la fecha no hay un análisis técnico del significado de los elementos que subyacen en su construcción. En este estudio se analizan, desde tres perspectivas, dos pruebas: el EXANI I, que se aplica para ingresar al bachillerato, y la de PISA, para estudiantes de 15/16 años. El autor examina las teorías: del test, que subyace en cada instrumento; de aprendizaje, con la que se construyen los reactivos; y del contenido, que se encuentra detrás de los reactivos de matemáticas y lenguaje. Concluye que las pruebas mexicanas responden conceptualmente a una generación anterior a las que está empleando la OCDE.
During the past ten years, significant impetus has been given in Mexico to the use of tests for the masses, known technically as large-scale. Although such testing instruments have been in operation since the mid 1970s, only recently have the results been made known to the general population. To date, no technical analysis has been made of the meaning of the underlying elements in their construction.
This study analyzes, from three perspectives, two tests: EXANI-I, the high school admissions test; and the PISA test for students aged fifteen and sixteen. The author examines the theories: of the test, which underlies each instrument; of learning, used to construct responses; and of the content, found behind the responses of mathematics and language. The conclusion is that Mexican tests are conceptually one generation behind the tests used by OECD.