Jonathan Lash, Fred Wellington
Ya sea que su empresa esté en una industria tradicional con chimenea o en un negocio ¿limpio¿ como la banca de inversión, cada vez más ella sentirá los efectos del cambio climático. Incluso los escépticos sobre los peligros del calentamiento están aceptando que el fenómeno tiene implicaciones de amplio alcance global, debido simplemente a que hay tanta gente preocupada. Los inversionistas ya están descontando los precios de las acciones de empresas mal posicionadas para competir en un mundo de calentamiento global. Muchas empresas enfrentan mayores costos de energía y materias primas a medida que los gobiernos en todo el mundo implementan cada vez más políticas que castigan las emisiones. Los consumidores, al momento de decidir sus compras, están tomando en cuenta la trayectoria ambiental de las empresas. Hay también un floreciente mercado de cuotas de emisiones de gases invernadero (el mercado del carbono), que transa anualmente decenas de miles de millones de dólares en estos activos. Este artículo ofrece un enfoque sistemático para trazar un mapa y responder a los riesgos del cambio climático. Según Jonathan Lash y Fred Wellington, del World Resources Institute, un centro de estudios medioambientales, los riesgos pueden ser divididos en seis categorías: regulatorios (políticas tales como nuevos estándares para las emisiones), productos y tecnología (desarrollo y comercialización de productos y servicios ambientalmente amigables), litigios legales (demandas que reclaman daño ambiental), reputación (cómo afectan a la marca las políticas medioambientales de su empresa), cadena de suministro (potencialmente, mayores costos de energía y materias primas) y físico (tal como un incremento en el impacto de los huracanes). Los autores proponen un proceso de cuatro pasos para responder al riesgo del cambio climático: cuantificar la huella de carbono de su empresa; identificar los riesgos y oportunidades que usted enfrenta; adaptar su empresa; y hacerlo mejor que sus competidores.