Miguel Manríquez Durán, Tonatiuh Castro Silva
La globalización es un proceso dinámico con determinaciones y efectos múltiples. Uno de ellos incide en la cultura vista ésta como un proceso de reproducción, reestructuración y sobredeterminación de diferencias, no de supresión de ellas. Si la cultura es un conjunto intersubjetivo de pautas de construcción y deconstrucción de lo social, para comprender fenómenos locales es importante reflexionar sobre la construcción del concepto de cultura regional. En Sonora hay varias, algunas con fundamento étnico, es decir, son el resultado de matrices biológicas y culturales a la vez, y otras que han asumido identidades diferenciadas, con rasgos propios y distinguibles. El análisis de la relación entre la globalización y las culturas regionales lleva a detectar dos direcciones: su inclusión en el proceso mundial y, a la vez, su exclusión en aspectos determinados.