Las políticas públicas, así como las iniciativas privadas en materia de ordenación de la conciliación de la vida laboral y familiar, se configuran, en nuestros días, como instrumentos esenciales para garantizar la estabilidad de una institución, la familia, motor económico y garantía de progreso social.
Public policies as well as social agreements taken by employers and unions in the private sector promote not only flexible work arrangements to aid reconciliation of professional and private life but the stability of the family as considered a source of economic growth and a guarantee of social progress.