El propósito de este artículo es mostrar la historicidad del modelo de Estado nacional, las implicaciones que de su desnaturalización extrae el laissez-faire liberal y su repercusión a escala local. Para ello se recorrerá el proceso de identificación de lo estatal y lo nacional y su función política y culturalmente ideológica, tomando como paradigma el modelo que Carl Schmitt elaboró a partir de la crisis del parlamentarismo en el II Reich.
Posteriormente, se detallará la actual crisis de dicha identificación y la progresiva acumulación de competencias por parte de instituciones de carácter transnacional. La relocalización internacional de la producción y la movilidad del conocimiento en la sociedad de la información ilustran hasta qué punto han quedado desfasadas las barreras nacionales. Se produce entonces un incremento espectacular de la presión sobre las políticas locales, obligadas a mejorar la oferta y la promoción urbanas para resultar competitivas en el mercado liberal. Y ello promoviendo la riqueza de proyectos con los que atraer el capital privado. Desde esta perspectiva podrá calibrarse hasta qué punto descansa el Fórum sobre una contradicción performativa entre su planteamiento público y el proyecto urbanístico, turístico y cognitivo que representa.