Sobre la base de las Tesis sobre Feuerbach de Marx, obra en la que se expone epigramáticamente el núcleo teórico de la revolución marxista en la historia de la filosofía y en la concepción de la historia, surge un conjunto de autores que perciben dicha propuesta como filosofía de la praxis. Ejemplos ilustrativos son, entre los más relevantes: Antonio Labriola, seguido por Antonio Gramsci, G. Lukács, K. Korsch, los fundadores de la Escuela de Frankfurt y a partir de los años 50, participan en esta dirección crítica Maurice Marleau-Ponty y de la Revista Praxis Gajo Petrovic y Mihailo Markovic. Se destacan, además, los representantes de la Escuela de Budapest (Agnes Heller, Ferenc Feher, etc.) así como Karel Kosic de Checoslovaquia y las reflexiones del francés Jean Paul Sartre, entre otros1, incluyendo desde luego al Dr. Adolfo Sánchez Vázquez, cuya eminente obra, Filosofía de la praxis, (1967 y 1980) desde el principio de la introducción delimita con profundidad su objetivo primordial:
"La presente obra aspira -siguiendo a Marx- a elevar nuestra conciencia de la praxis como actividad material del hombre que transforma el mundo natural y social para hacer de él un mundo humano"