La Ley de Prevención de Riesgos Laborales obliga al empresario a llevar a cabo una investigación propia cuando se haya producido un daño para la salud de los trabajadores, con el objetivo de detectar las causas y poner en marcha medidas que eviten que vuelva a suceder un hecho similar. Sin embargo, la normativa es muy escueta y el responsable de seguridad y salud se encuentra con toda una serie de interrogantes a la hora de desempeñar su trabajo. Este artículo pretende dar algunas respuestas a los encargados de realizar estas investigaciones, para que puedan identificar situaciones de riesgo desconocidas o infravaloradas e implantar medidas correctoras para su control.