Este trabajo analiza los retos jurídico-políticos que presenta la realidad migratoria, intentando distinguir entre el discurso teórico y la practica bajo la luz de los principios constitucionales. Para ello comienza distinguiendo las consecuencias de la globalización, que crea desigualdades sociales, una mayoría globalizadora y una minoría globalizada. Posteriormente estudia la evolución de la tipología de la inmigración, desde el emigrante temporal hasta el residente estable. Finalmente, tras dar cuenta de los dos modelos que se presentan en los Estados de la Unión Europea, el modelo de asimilación frente al modelo de integración, presenta las posibilidades de nuestro texto constitucional. Concluye que la inmigración presenta los más relevantes retos al Estado Constitucional, retos que habrán de abordarse bajo tres ejes: a) un fortalecimiento del control de los flujos migratorios, b) una mayor integración de los inmigrantes en la sociedad receptora, y c) una mayor cooperación dirigida a desarrollar los países de origen de la inmigración.