El objetivo de este artículo es investigar la relación entre crecimiento y comercio en la Unión Europea (UE). Para ello se utiliza la metodología de econometría espacial en datos bilaterales de comercio. La evidencia indica que el proceso de integración europea ha promovido el comercio, especialmente entre países cercanos, y que el comercio ha sido un importante canal de difusión de un crecimiento interdependiente, siendo este hecho más importante al comienzo del proceso integrador que en los últimos años. Este resultado ilustra la idea de que, a través de un incremento en el comercio, la integración económica ha inducido externalidades a los distintos países miembros.