Este articulo resume, en la primera parte, las principales perspectivas teóricas relativas a las implicaciones de las tecnologías de la información y comunicación en las relaciones laborales y de género. En la segunda, presenta un breve panorama del sector de la comunicación e información en Portugal. Por fin, contraria las tesis deterministas que consideran la tecnología una fuerza autónoma y exterior a la sociedad, sugiriendo antes que sus consecuencias en las relaciones de género son contingentes, complejas y ambiguas. Se constata que, a pesar de la creciente presencia de mujeres trabajadoras en estos nuevos sectores de la economía, persiste un patrón de segregación sexual, tanto horizontal como vertical. El estudio centrado en el sector de las comunicaciones ha demostrado que los hombres están en ocupaciones cuyo contenido es de mayor complejidad técnica, que son consideradas estratégicas, que se benefician de remuneraciones más elevadas, de oportunidades de desarrollo profesional y de seguridad de empleo. Las mujeres, por su lado, están sobrerrepresentadas en ocupaciones que requieren sobre todo "competencias sociales", de estatus inferior, que ofrecen pocas oportunidades de progresión y que, en muchas situaciones, son precarias.