El año 2005 estuvo marcado por numerosos sobresaltos políticos en Oriente Medio. El estado de ánimo en la región desde el comienzo de 2006 se caracteriza por una creciente incertidumbre y preocupación. Las tensiones regionales, en lugar de disiparse, han aumentado debido al cúmulo de presiones que llegan desde dentro y fuera de sus fronteras