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Jordi Pujol i Soley
El presidente de la Generalitat de Cataluña presenta el fenómeno de la inmigración extranjera desde un posicionamiento de país con una extensa tradición de acogida, haciendo hincapié en la experiencia positiva de Cataluña en el momento de recibir población inmigrada y en el hecho de que se pueda hablar de un modelo catalán de integración.
El núcleo central de la conferencia hace referencia precisamente a cómo se adecua el modelo catalán a la nueva realidad que supone la llegada de inmigración extranjera a Cataluña. Esta inmigración implica, en opinión de Jordi Pujol, una serie de retos ligados sobre todo a la diversidad cultural y, en especial, al hecho de que la presencia de la religión musulmana aporta una nueva dimensión a la gestión del hecho migratorio.
El desglose del modelo propugnado por Pujol hace especial referencia a la garantía de la igualdad de derechos fundamentales y a la necesidad de unas normas claras y justas de los derechos y deberes de los nuevos inmigrantes. Otra línea que se destaca es la necesidad de crear expectativas de futuro para poder integrar a esta población, impulsando políticas claras y asumibles para el conjunto de la sociedad. En ese sentido, Pujol apuesta por garantizar la cohesión social, tanto a partir del despliegue del Estado del bienestar como también gracias a la posibilidad de poder contar con la implicación de la propia sociedad. Desde la perspectiva más amplia de la cooperación, el tercer gran ámbito, que desde Cataluña se considera básico, es la inversión en los países emisores como herramienta tan útil como necesaria para su desarrollo.
