En su Ética de la liberación en la época de la globalización y la exclusión, Dussel formula y pretende justificar un "principio ético material universal". Con ello resalta y asume la relevancia ética de la vida humana, de la corporalidad viviente de cada sujeto humano y efectúa una crítica a la racionalidad argumentativa. Este artículo pone en cuestión la adecuación y consistencia de su crítica a la razón. El objetivo principal es mostrar que la argumentación dusseliana conlleva problemas de conceptualización y de consistencia. Frente a Dussel, se defiende el concepto de razón argumentativa, y se intenta demostrar que éste es presupuesto lógicamente por él mismo, de modo que no puede consistentemente impugnarlo con base en su principio ético.