La sociología de la filosofía es un territorio relativamente poco practicado. Y, sin embargo, la sociología dispone de armas para tratar la filosofía como un producto cultural específico, respetando, a la vez, la autonomía del discurso filosófico y la exigencia de dar razón social de lo social que se encuentra en la base de la constitución de la sociología como ciencia. Este artículo pasa revista a las adquisiciones de la sociología de la filosofía de Pierre Bourdieu y del Centre de Sociologie Européenne (CSE), discutiendo alguna de sus propuestas y reivindicando la fecundidad de la mayoría de ellas para el trabajo sociológico.