Si bien la privatización de empresas públicas no es un hecho reciente, la magnitud de las últimas ventas en España nos lleva a reflexionar sobre los fundamentos teóricos sobre los que se asientan las enajenaciones de activos públicos al sector privado. La privatización puede tener objetivos distintos al de la mejora de la eficiencia, como por ejemplo, se analizan aquí, la búsqueda del accionariado popular o la reducción del déficit público. Sin embargo, la enajenación de activos no parece ser la mejor forma de conseguirlos. El logro de la eficiencia, definida a través de la eficiencia productiva y asignativa, se estudia a través de la teoría de la agencia. Tan importante como la pro-piedad es la estructura de mercado en que opera el servicio por lo que de no producirse la venta en un marco de competencia perfecta debería acompañarse de la liberalización del sector