Este artículo analiza la etapa de autarquía que vivió la economía española, fundamentalmente, entre los años 1939 y 1959. Para ello, se examinan las bases de las que partió la industrialización en España y la evolución que siguió ésta hasta 1936, en el marco de un proteccionismo con graves secuelas monopolísticas, que serian un campo abonado para la ulterior fase de autarquía. A ello se sumaría la destrucción de una parte del equipo industrial del país durante la Guerra Civil, así como la instauración de un modelo económico intervencionista.