Este artículo aborda la influencia de la globalización financiera sobre la evolución del tipo de cambio. Se destacan dos cuestiones. Primero, el aumento de la dispersión de los activos internacionales netos implica un fortalecimiento de las tendencias a largo plazo de los tipos de cambio reales. Segundo, los efectos de los movimientos de divisas sobre la riqueza exterior neta son una función creciente del tamaño de los saldos internacionales.