En el presente artículo se estudian los problemas, que las mujeres se encuentran al formar parte de un modelo sindical fuertemente masculinizado. Se analiza la lucha que llevaron a cabo junto a los trabajadores varones, para conseguir unir sus fuerzas a favor de la clase obrera, sus aspiraciones, fracasos, y los procesos huelguísticos durante la dictadura franquista en los que los sindicatos, todavía clandestinos, antes de la muerte del dictador, intervinieron orientando esta lucha hacia la confluencia conjunto de intereses de clase. En este proceso las mujeres pospusieron reivindicaciones propias de género y cedieron ante la presión de los trabajadores varones. Algunas, además, se sintieron marginadas en su propio sindicato e iniciaron un proceso de confrontación que las llevó a dejar la militancia activa y al desencanto político. En este trabajo se estudiará, con ayuda de las fuentes orales, algún testimonio de vida y se tratarán los modelos de conflictos fabriles para ejemplificar este proceso.