Durante el último cuarto del siglo XIX y las primeras décadas del XX se produce en Europa una gradual transformación de la intervención pública, de manera que se va forjando un Estado mucho más volcado hacia la protección y seguridad de los ciudadanos y más involucrado con el desarrollo económico. El creciente protagonismo del Estado se verá reflejado en un incremento del gasto público con relación al producto nacional que, pese a ciertos altibajos, será ininterrumpido hasta su explosión definitiva con el estallido de la Gran Guerra. Este fenómeno es analizado en el presente trabajo, donde veremos cómo la participación del gasto público español en la renta nacional va a ir siempre por detrás de las proporciones alcanzadas por los presupuestos de los países de nuestro entorno, especialmente en Alemania, Gran Bretaña e Italia. Además, se produce en estos años una fundamental transformación en la estructura del gasto público que dará paso a un nuevo concepto de Estado, embrión del actual Estado de bienestar. Y también en este aspecto se pone de manifiesto el atraso relativo que, en general, muestra la estructura del gasto español frente a la preponderancia que en la Europa más desarrollada iban adquiriendo los gastos sociales y económicos.