Las Administraciones Públicas del futuro deben perfilarse como organizaciones abiertas y comunicativas con los ciudadanos para poder responder de una manera eficaz y eficiente a sus necesidades y demandas. El presente artículo intenta analizar algunos de los procesos básicos que habrán de llevarse a cabo para mejorar la atención y comunicación con los ciudadanos. Sobre todo se centra en el análisis del personal al servicio de la atención al ciudadano, en los principales instrumentos que facilitan la relación de comunicación entre Administración-administrado, y en los canales previstos para incentivar la participación y comunicación de los ciudadanos con la Administración.