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Alicia Matías Fernández, Pablo Antonio Muñoz Gallego, Óscar González Benito 
En este estudio se analiza la selección de establecimiento minorista por parte del consumidor mediante una metodología basada en el modelo MCI. La finalidad es evaluar el efecto de las distintas dimensiones estratégicas de los establecimientos competidores en el comportamiento de compra del consumidor. A diferencia de la mayoría de las aplicaciones de este modelo, el planteamiento propuesto puede caracterizarse por: (1) el énfasis está en la perspectiva subjetiva del consumidor; (2) el comportamiento explicado se concibe como una asignación de recursos, más concretamente, como la distribución del presupuesto de compra; y (3) el estudio se desarrolla a un nivel micro-espacial en el sentido de que el escenario competitivo de análisis se reduce al entorno espacial inmediato de los consumidores. Los resultados confirman que una calibración transversal del modelo permite evaluar la respuesta de mercado a los distintos componentes estratégicos de la imagen minorista. El precio, la variedad y la calidad resultan factores clave a tener en cuenta en el planteamiento estratégico del supermercado aunque otras posibles dimensiones de la imagen tampoco deban ser obviadas
