Luis de la Calle Robles
Con la crisis de las llamadas políticas de demanda, las políticas de oferta (basadas principalmente en la inversión en bienes públicos) han emergido como la herramienta fundamental para los gobiernos que persiguen la reelección (de manera altruista o egoísta). Sin embargo, ¿cómo distribuyen éstos el gasto en bienes públicos entre las distintas unidades territoriales que conforman un país? ¿Siguen criterios puros de eficiencia económica o, por el contrario, promueven mayores niveles de inversión allí donde esperan atrapar un mayor rendimiento político de las mismas? Esta cuestión, la utilización estratégica (o no) del gasto público motiva este trabajo. Se analiza el gasto provincial en carreteras en España por los gobiernos socialistas (1982-1996). Principalmente, hay indicios de dicha utilización estratégica, si bien los electores parecen no ser capaces de evaluarla correctamente.
With the demise of demand-side policies, supply-side policies have become the most useful tool for incumbents to get re-elected. However, we don¿t know really how they decide to allocate the budget between the different territorial constituencies: whether they promote economic efficiency criteria, or whether they pursue to maximize the probability of re-election (as long as both are not compatible). In this paper I grab this matter by looking at the allocation of infrastructure (concretely, road) spending in the provincial districts during the socialist governments in Spain (1982-1996). Broadly speaking, governments seem to have into account political criteria when allocating road budgets, even though citizens don¿t seem to react to these incentives.