En plena sociedad de la información, en una sociedad invadida por los medios de comunicación, las pantallas cobran una relevancia especial gracias a los avances tecnológicos. La televisión sigue siendo, sin duda, la estrella de las pantallas, encauzando una cultura global que es mediatizada por las grandes empresas de la información bajo el mando de los poderes económicos y políticos mundiales. El gran desafío de los educadores �padres, profesores, responsables y comunicadores� es adquirir la fuerza suficiente para, en un principio, utilizar el poder icónico y emotivo de la televisión con finalidades educativas, y al mismo tiempo, proponer a los educandos �alumnos y sociedad en general� las posibilidades educativas y didácticas suficientes como para convertir la fuerza de la televisión y su mensaje, en un vehículo e instrumento imprescindible de búsqueda de información, de apreciación de la realidad y de puerta a la investigación.
At the height of the information society, in a society permeated by communication media, screens take a special relevance thanks to technological advances. Television continues undoubtedly to be the star of all screens, channeling global culture as it is influenced by large information businesses, which in turn are under the command of world economic and political powers. The big challenge for educators �parents, teachers, leaders and communicators� is to acquire enough strength, initially, to use the emotive and iconic power of the television for educational purposes. At the same time, we must put forward to those being educated �students and society in general� enough educational and didactic possibilities to convert the strength of television and its message into an essential vehicle or instrument for information searching, for appreciation of reality and as a door to research.