El presente artículo tiene como objetivo estudiar la liberalización de las telecomunicaciones en la Unión Europea. La competencia en las telecomunicaciones tiene repercusiones directas sobre el crecimiento, el empleo y la competitividad del conjunto de la economía. En primer lugar, hay que destacar la mejora gradual pero continua, de los niveles de servicio, precio y calidad. En paralelo con el fuerte crecimiento del uso de internet y de las comunicaciones móviles, las autoridades nacionales de reglamentación dedican más atención a las necesidades de los consumidores desfavorecidos y rentas bajas. En lo que se refiere a las tarifas y a la asequibilidad, el consumidor ha salido favorecido en términos reales. La Unión Europea ha establecido medidas tendentes a proteger el servicio universal y reforzar los derechos de los consumidores. El reequilibrio de las tarifas favorecerá a la larga el desarrollo de la sociedad de la información.