A partir de investigaciones realizadas estos últimos años y de la reflexión de un grupo de investigadores sobre el concepto del trabajo, el autor muestra que el trabajo es una acción situada, informada, coordinada, reglada y evaluada que se efectúa bajo coacción. El autor muestra también que esas características no son suficientes para definirlo y que la naturaleza de las actividades no hace al "trabajo". Solamente ciertas relaciones sociales, aparecidas recientemente en la historia, denominan trabajo a las acciones efectuadas dentro de su ámbito.