En este artículo se aborda un análisis sobre las relaciones entre los cambios en el proceso de trabajo y las relaciones laborales, como determinantes básicos para las regulaciones en los sistemas de calificación y clasificación profesional, desde la idea de que es el concepto de cualificación profesional de los trabajadores, el eje sobre el que se deben estructurar los mecanismos de clasificación profesional y el tratamiento de la movilidad funcional. Asimismo, propone como alternativa la necesaria sustitución de los actuales sistemas de calificación profesional, determinados por las Ordenanzas Laborales y caracterizados como producto de la organización del trabajo taylorista, por nuevos sistemas de clasificación profesional más flexibles, ligadas a los niveles del sistema educativo, en los cuales la base de la calificación sean las capacidades profesionales de los trabajadores y la formación profesional, reglada y continua, los elementos configuradores de las trayectorias profesionales, de la promoción y de la movilidad funcional; propuesta incluida en los procesos de negociación colectiva de ámbitos estatales sectoriales.