El desarrollo de los mercados financieros y la descentralización de la producción transforman profundamente la organización de la empresa y tienen múltiples consecuencias para la aplicación del derecho del trabajo. La autora analiza los diferentes niveles de organización empresarial con el fin de determinar los problemas que plantean las nuevas relaciones financieras y productivas que se establecen dentro de la empresa y entre unas empresas y otras. A continuación explora los escollos que aparecen en el derecho positivo para aprehender dichas relaciones, centrándose en tres temas esenciales: las relaciones laborales y la adopción de decisiones en la empresa; el contrato de trabajo y la identificación del empleador, y las condiciones de trabajo y la seguridad de los trabajadores.