El impacto de la práctica basada en la evidencia (PBE) es uno de los acontecimientos más destacados de la última década en el campo de la Medicina. Producto de un tiempo caracterizado por la explosión de la tecnología de la información, un creciente sentido del riesgo, y la consagración de los principios de economía, efectividad, transparencia y atenciaón al consumidor, la PBE se ha extendido rápidamente desde el campo de la salud a otras áreas, entre las que se incluye el Trabajo Social. El nuevo paradigma ha generado entusiasmo entre amplios sectores de la profesión, pero también un vivo debate acerca de la transferibilidad de los principios de la PBE a una disciplina, Trabajo Social, que opera en un contexto de circunstancias sociales particularmente complejas y dispares