La ausencia de investigación sobre los factores sociológicos que inciden en la conducción de vehículos afecta negativamente a las propuestas de la Unión Europea en relación con la inseguridad en la carretera, que se cobra cada año 50.000 muertos y dos millones de heridos. El control de la fatiga en los conductores profesionales a través del tacógrafo ve reducidos sus efectos al no contemplar la flexibilidad en los descansos, la perifericidad, la posibilidad de reintegración a su entorno de los conductores. El factor humano, como origen principal de los accidentes, tiene un componente clave, hasta ahora ignorado de facto, el factor sociológico. Elaborar un modelo de rol del conductor que incorpore la incidencia de los condicionantes económicos, sociales, culturales, educativos, es una de las tareas de la sociología del transporte