El arsenal de medidas represivas que el neoliberalismo ha adoptado globalmente Contra la "multitud" se ha multiplicado con la excusa del incidente del 11 de septiembre de 2001. Ciertamente, el atentado ha servido de pretexto para aumentar la represión contra las fuerzas de resistencia de la izquierda en el mundo en nombre de la lucha contra el terrorismo. Una muestra de ello es la proliferación de una extensa normativa de distinta índole y alcance que cercena las libertades cívicas, y que, bajo aquel pretexto, pretende combatir con toda seguridad a los movimientos progresistas y de liberación. Ante la conversión de la excepción en regla, de la ausencia de derecho en los "nuevos" campos de concentración, surge de nuevo la duda de la dialéctica de la Ilustración: ¿nos encontramos ante una perversión del sistema neoliberal o es su única consecuencia previsible?