El comportamiento térmico del ser humano tiene importantes implicaciones sobre la vida cotidiana. En la evaluación de puestos de trabajo, donde resulta fundamental conocer la respuesta y adaptación del cuerpo humano a distintas situaciones. Esta respuesta dependerá tanto del funcionamiento termorregulador de la persona como de las condiciones externas, temperatura, humedad, influencia de la indumentaria, la radiación solar directa (o de otro foco) o el trabajo realizado entre otras variables.
La necesidad de realizar una simulación del comportamiento térmico del ser humano y de la ropa que utiliza es obvia, cuanto mejor se conozcan las variables de las que depende, cómo y cuánto afectan a la respuesta térmica obtenida, mejor se podrá hacer frente a situaciones extremas, se podrán establecer una serie de límites saludables y de confort en diferentes situaciones cotidianas o e incluso diseñar tejidos especiales para resistir las condiciones atmosféricas más adversas.
En cualquier caso la disponibilidad de una herramienta informática que sirva para simular el comportamiento térmico del ser humano permitirá ahorrar mucho tiempo y coste en experimentación.
Con el nuevo modelo desarrollado se pretende calcular, para cada parte del cuerpo, todas las variables que intervienen en la transferencia de calor en el ser humano, teniendo en cuenta la ropa que lleva el individuo en cada zona y las características de ésta (aislamiento térmico, espesor y permeabilidad al vapor de agua). El objetivo es realizar un modelo útil para realizar comparaciones y obtener, para un determinado puesto de trabajo y unas condiciones ambientales dadas, tendencias de la evolución de las temperaturas de distintas partes del cuerpo, y otras variables de interés como sudoración, vasodilatación o vasoconstricción.