El autor propone tres elementos clave para tratar el tema de la interculturalidad y la globalización: diferencia, desigualdad y desconexión. Se pregunta no sólo cómo reconocer las diferencias o corregir las desigualdades, sino también cómo conectar las mayorías a las redes globales. Para ello, en primer lugar, sitúa la desigualdad y la diferencia, y aborda la última desde las teorizaciones de los estudios étnicos. Y, en segundo lugar, retoma la articulación de diferencias y desigualdades propuesta por Pierre Bourdieu y modificada por autores que desarrollaron perspectivas distintas a partir de su colaboración inicial con él, como Claude Grignon, Jean-Claude Passeron y Luc Boltanski. A Canclini le atraen los intentos de estos autores de ¿abrir el horizonte nacional en un tiempo en que la interculturalidad se mundializa¿.