EL papel jugado por las empresas multinacionales cotizadas en el proceso de armonización contable internacional actuales incuestionable. Es en este ámbito donde se ha puesto de manifiesto deforma más alarmante la falta de comparabilidad de la información financiera emitida en mercados de capitales internacionales. Falta de comparabilidad que se pone de manifiesto, no sólo en diferencias cuantitativas entre cifras de resultado y fondos propios calculadas según unos u otros principios contables, sino también en la necesidad de ajustes como consecuencia de diferencias normativas en determinados tratamientos contables. Los pasos emprendidos en Europa para adoptar una solución a este problema, pasan por la adopción de Normas Internacionales de Información Financiera, aunque las empresas europeas cotizadas en la Bolsa de Nueva York mantienen la utilización de normativa contable local propia, y sólo algunas optan por la aplicación directa de US-GAAP, siendo una minoría las que aplican IFRS. Entre otras características empresariales, será la posibilidad de poder presentar directamente la información financiera según normativa no local en determinados países, contemplada por los organismos supervisores de cada mercado, lo que determinará principalmente que las empresas se decanten por la aplicación de normativa contable de referencia internacional.