Santiago, Chile
En este trabajo se hace una revisión general de la evidencia disponible sobre la situación del desempleo, la distribución del ingreso y la relación que el gasto social tiene con estas variables. Se señala que el desempleo debe entenderse básicamente como una situación no voluntaria que ha tenido un efecto negativo sobre la distribución del ingreso que se adiciona a tendencias de tipo secular. El trabajo presenta evidencia estadística sobre las características de los ocupados y la aplicación del gasto social. Se concluye que el problema social de mayor envergadura se conecta con un grupo de desocupados en extrema pobreza y, al parecer, eventualmente inempleables en las actuales condiciones; así se establece que la administración del gasto social ha sido muy ineficiente como para detectar diferentes tipos de necesidades en distintos desempleados, que hay que hacer un esfuerzo definido en esta dirección y también en lo que respecta a la administración centralizada del Programa y la redefinición de los objetivos a atender.