Francisco Pérez Mackenna
El riesgo ha sido siempre una característica presente en toda actividad humana. No es más que el reflejo de que el futuro nos depara un buen número de sorpresas y que la clarividencia no es uno de los atributos dela naturaleza del hombre. La actividad productiva no está exenta de lo anterior. Aún más, es la disposición a emprender proyectos riesgosos lo que distingue a empresarios de asalariados, a accionistas de acreedores, etc. La actividad agrícola también debe sufrir los problemas de la incertidumbre. La decisión de siembra debe tomarse sin conocer con certeza el precio al momento de la cosecha. Este riesgo se suma a aquel de la función de producción y ambos conjuntamente determinan la variabilidad delos ingresos del agricultor. En el presente trabajo se postula que el problema de la variabilidad de precios en el sector agrícola es de especial importancia debido a la dificultad que tienen los agricultores para diversificar sus portafolios de inversión. En este sentido se recomienda la creación de mecanismos que permitan al inversionista que así lo desee separar el riesgo de precios del de cantidad. Sin embargo, la estabilización de precios, la que debe interpretarse como un proceso destinado a reducir la variabilidad de éstos y no como un mecanismo de distribución de subsidios, debiera ser opcional para cada productor operando bajo un esquema similar al de los seguros. El Estado tiene en este campo un importante papel que cumplir. Su responsabilidad abarca tanto el proveer información a quienes deciden la siembra (lo que tiene un rol estabilizador), como el mantener stocks para emergencias y ayudar a que los mercados sean competitivos y completos. Su papel estabilizador debe por tanto basarse en la realidad de los mercados, con sus abundancias y escaseces. En este sentido, se propone que los mecanismos estabilizadores más que transformarse en un sistema de fijación de precios en base al costo de producción, incorporen conceptos como el de los precios a futuro y busquen la forma de aumentar la competitividad de los mercados de productos agrícolas.