El autor examina la presencia del mito en la creación literaria latinoamericana, afirmando que constituye, asimismo, la otra cara de la utopía. Los mitos, se señala, son parte de la cultura mestiza, de la identidad espiritual e histórica, del imaginario y de la fe siempre latente en un futuro mejor. De ahí que en las letras latinoamericanas el mito no sea sólo un recurso literario para elevar el nivel de significación de las ficciones o poemas, sino que está enraizado como visión del mundo, visión religiosa del universo en las culturas precolombinas.