El registro de marcas no tradicionales en el fútbol, como celebraciones y gestos icónicos, ha ganado relevancia en la protección de la identidad y la explotación comercial de jugadores como Dani Olmo. Su solicitud de registro en la EUIPO, basada en su gesto de marcar la hora en su muñeca, se analiza bajo el Reglamento (UE) 2017/1001, que establece requisitos clave como distintividad y representación gráfica precisa. Casos como los de Kylian Mbappé demuestran cómo estos elementos pueden convertirse en activos comerciales valiosos. Aunque aún enfrenta retos legales, la estrategia de Dani Olmo refuerza su imagen en el mercado deportivo y destaca la importancia de la propiedad industrial en el fútbol moderno.