Roger Sales Jiménez
El presente artículo pretende acercar al lector a la mediación familiar, lugar en el que por su demostrada eficacia a la hora de empoderar a las partes y salvaguardar las relaciones entre las mismas se consigue que los acuerdos alcanzados sean duraderos sin que realmente exista un perdedor o ganador como puede suceder en las resoluciones judiciales. Se trata de una alternativa válida ante las posibles complicaciones de las ejecuciones de sentencias en procedimientos de familia por la dificultad a la hora de hacer cumplir lo dictado por un tribunal. Se analizará históricamente como ha sido la relación de los españoles con la mediación, sus bases legales y se analizarán casos concretos para mostrar la realidad de la misma.