Israel Díaz García, Marta Vizcaíno Rakosnik, José Luis González Álvarez
El acoso sexual a menores a través de las TIC constituye una tipología delictiva que causa gran alarma social, y cuyo incremento se ha visto favorecido por el auge y uso de las Tecnologías de Información y Comunicación por parte de los menores de edad. Distintos estudios científicos han puesto de manifiesto la importancia de la antisocialidad para explicar las causas de los delitos sexuales contra los menores. El presente estudio se ha propuesto comparar la historia y reincidencia criminal en delitos no sexuales, en tanto muestra de comportamientos antisociales.de una muestra de detenidos por delitos de acoso sexual a menores a través de las TIC (child grooming), con otras dos muestras de detenidos por delitos de pornografía infantil y abuso sexual de menores, para evaluar si son más parecidos en dicha historia criminal a unos que a los otros, una vez se considera que los primeros están mucho mejor socializados que los segundos. Los resultados han mostrado que los acosadores sexuales de menores tienen una historia criminal, nivel de agresión en sus delitosyperfil criminógeno que revela una elevada antisocialidad, muy próxima a la de los abusadores sexuales físicos, y muy alejada de los meros consumidores de material sexual infantil.
The sexual harassment of minors through ICT constitutes a criminal typology that causes great social alarm, and whose increase has been favored by the rise and use of Information and Communication Technologies by minors. Various scientific studies have highlighted the importance of antisociality in explaining the causes of sexual offenses against minors. The present study aims to compare the criminal history and recidivism in non-sexual offenses, as a manifestation of antisocial behaviors, among a sample ofindividuals arrested for sexual harassment of minors through ICT (child grooming), with two other samples of individuals arrested for child pornography and sexual abuse of minors, to assess whether they are more similar in their criminal history to one group than the other, once it is considered that the former are much better socialized than the latter. The results have shown that sexual harassers of minors have a criminal history, level of aggression in their offenses, and criminogenic profile that reveal a high level of antisociality, very close to that of physical sexual abusers, and far removed from mere consumers of child sexual material.