Alberto Fuguet
Uno de los estrenos cinematográficos más notables del año pasado, sostiene el autor, fue El joven manos de tijeras, realización de Tim Burton, considerado el niño-genio de Hollywood. A pesar de que el filme no tuvo gran éxito de público, el personaje de Edward, un adolescente fabricado por un científico loco, que en vez de manos posee tijeras, las cuales utiliza para crear las más curiosas esculturas, logró calar hondo en la siquis colectiva de los jóvenes, quienes vieron en este curioso y emotivo personaje un símbolo de los tiempos que corren. Especialmente atractivo, plantea aquí Alberto Fuguet, es entender a Edward como una metáfora del artista adolescente contemporáneo.