Vigo, España
En este artículo se investigan los aspectos lingüísticos implicados en el uso de la aplicación digital de ligue Tinder. En particular, se han estudiado (1) cómo se elaboran los perfiles de usuario y cuáles tienen mayor éxito, (2) la importancia que se le da a la norma ortográfica a la hora de seleccionar (o no) un perfil y (3) la forma más adecuada (o no) de comenzar una conversación una vez salta el match. Para ello se siguió un método cuantitativo mediante un cuestionario distribuido de modo digital. Se obtuvieron 268 respuestas de usuarios heterosexuales. Las respuestas eran de tipo cerrado y de tipo abierto. Para analizar los datos se emplearon los programas Excel y Sketch Engine. Entre las principales conclusiones es posible destacar que (1) en los perfiles se busca brevedad y originalidad y algún dato que dé pie a empezar una conversación; (2) los comentarios machistas o con listas de requisitos conducen a rechazar los perfiles; (3) las faltas de ortografía pueden conducir a un rechazo, aunque guste la foto del perfil ‒especialmente entre las mujeres‒, (4) los adjetivos más valorados en los perfiles de ellos son simpático, sincero, respetuoso, espontáneo, aventurero, extrovertido y humilde; (5) los adjetivos más valorados en los perfiles de ellas son simpática, espontánea, extravertida, sincera y aventurera; (6) para empezar una conversación, de manera general, se muestra para ambos géneros, una preferencia por un saludo y una pregunta, por encima de comentarios o entradas más directas; (7) los emojis sexuales o motes sexuales-afectivos (monada, guapa, bebé...) provocan un alto grado de disgusto; (8) los usuarios critican los largos silencios o turnos de palabra abandonados.
This article investigates the linguistic aspects involved in the use of the digital dating app Tinder. In particular, it studies (1) how user profiles are crafted and which ones are most successful, (2) the importance of spelling norms when selecting (or not) a profile, and (3) the most appropriate (or inappropriate) ways to start a conversation once a match is made. A quantitative method was used through a digitally distributed questionnaire. A total of 268 responses from heterosexual users were obtained. The responses included both closed and open-ended questions. Excel and Sketch Engine were used to analyze the data. Among the main conclusions, it can be highlighted that (1) profiles seek brevity and originality, along with some detail to sparka conversation; (2) sexist comments or lists of requirements lead to profile rejection; (3) spelling mistakes can result in rejection, even if the profile photo is appealing —especially among women; (4) the most valued adjectives in male profiles are friendly, sincere, respectful, spontaneous, adventurous, extroverted, and humble; (5) the most valued adjectives in female profiles are friendly, spontaneous, outgoing, sincere, and adventurous; (6) when starting a conversation, there is a general preference for a greeting and a question for both genders, over more direct comments or approaches; (7) sexual emojis or affectionate nicknames (like cutie, gorgeous, baby...) provoke a high degree of discomfort; (8) users criticize long silences or abandoned turns of speech.