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Rafael Santiago Orti
El actual escenario internacional, marcado por el conflicto en Ucrania, ha desencadenado cambios significativos en la esfera geopolítica cercana a Rusia. El histórico dominio ruso en Kazajistán, principal aliado en AsiaCentral, está siendo gradualmente desplazado por China, que ha progresado en sus acuerdos energéticos y comerciales en la región, relegando a Moscú a un papel secundario. La situación en Ucrania está mermando las capacidades de Rusia como garante de seguridad en la región centroasiática, debilitando aún más su posición. A pesar de esto, Rusia conserva una influencia significativa en la región y no está dispuesta a renunciar a sus intereses en Kazajistán, pieza clave en el tablero centroasiático.
The current international scenario, marked by the conflict in Ukraine, has triggered significant changes in the geopolitical sphere close to Russia. Russia’s historical dominance in Kazakhstan, its main ally in Central Asia, is gradually being displaced by China, which has made progress in its energy and trade agreements in the region, relegating Moscow to a secondary role. The situation in Ukraine is eroding Russia’s capabilities as a security guarantor in the Central Asian region, further weakening its position. Despite this, Russia retains significant influence in the region and is not willing to give up its interests in Kazakhstan, a key player on the Central Asian chessboard
