Ignasi Brunet Icart
, Antoni Vidal Suñe
Accésit Premio Estudios Financieros 1997 El cambio cultural presente en las grandes empresas debería tener, también, su impacto en la adquisición de nuevas capacidades de gestión en las pequeñas. Es aquí donde los esfuerzos formativos deben centrar su atención en el desarrollo de las potencialidades de las personas, si se desean resolver los problemas competitivos a que se enfrentan en la actualidad las empresas y los territorios. Es ineludible, por tanto, un cambio de mentalidad que propicie la transformación organizativa y cultural en la administración de las pequeñas empresas, lo que lleva a la formación y la consideración de los recursos humanos como un recurso de elevado valor estratégico.