Luis González Escandón
Con la aprobación de la Ley 31/1995, de Prevención de Riesgos Laborales, y su desarrollo posterior en el Real Decreto 39/1997, Reglamento de los Servicios de Prevención, se produce un cambio importante en la práctica preventiva que afecta tanto a las empresas como a las Mutuas de Accidentes de Trabajo y Enfermedades Profesionales.
En este trabajo se analiza cómo repercutirá la nueva situación que plantean estas novedosas normas principalmente en la futura actuación preventiva de las Mutuas.